jueves, 23 de junio de 2011

RITUAL DEL DINERO PARA LA NOCHE DE SAN JUAN

RITUAL  PARA  EL DINERO
EN LA NOCHE DE SAN JUAN


Objetivo: Atraer formas nuevas de ganar dinero y más facilidad para que la abundancia económica te llegue.

Materiales a emplear:  Energías de los cuatro elementos en equilibrio.
Para el fuego: una hoguera.
Para el agua un bol con agua.
Para el aire: un incienso o encontrarte al aire libre si es posible y respirar conscientemente.
Para la tierra: piedras o cristales de tu preferencia. Una imagen del planeta, de la Madre Tierra o el contacto directo con la naturaleza.


El orden, el primer mensaje que recibo es el tema del orden. Y cierto es que, en muchas ocasiones en sesiones con las personas que me visitan, he encontrado que un problema económico es un problema de orden. Quizá no solo se refiera esto a que el orden permite que las energías fluyan fácilmente hacia nosotros, si no que hay un orden en el cosmos con el que podemos armonizarnos para aprovechar aquellos momentos donde la prosperidad como vibración está abierta para mí. Hablo de la receptividad y la actividad. Del Yin y el Yang.

Así que lo primero que haremos es dibujar el hexagrama del I Ching número 34

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En negro o en tinta china. Y lo tendremos cerca durante el ritual, a la vista.

Y recitaremos:


 “Hoy me abro al orden en todos sus aspectos. Y me uno al Orden Universal que me abastece de las mejores posibilidades y los mejores momentos para atraer a mi vida la riqueza material, como expresión de esa creación infinita de la que yo también formo parte.”

Me uno a la Madre Tierra que colma y nutre mi cuerpo, y me mantiene en una conexión perfectamente ordenada con toda la abundancia material que está dispuesta para mi. Me abro a recibir de ella la manutención, el alimento, el dinero que necesito para que esta experiencia de vida fluya benéficamente para mi y los míos y me permita un estado vibratorio a través del cual pueda manifestar el propósito que mi Ser trae aquí, a la Tierra, porque ese es mi deseo.

Quiero dar gracias a la Madre Tierra por toda la abundancia que contemplo cuando abro de verdad los ojos:  mares,  selvas, bosques y  montañas, valles, espacios sagrados. Seres humanos de diferentes razas. Animales, leones, delfines y ballenas y todos los seres vivos que pueblan la tierra. La fertilidad, la prosperidad en la Tierra es un hecho, y me uno a esta energía a la que pertenezco.

Y me uno al cielo, al universo de movimiento infinito donde hay una constante y es la creación, la actividad, y un orden que nos proporciona el equilibrio, la conexión con todo y la posibilidad de aprovechar las influencias que esos movimientos cósmicos producen en nosotros.

Quiero dar gracias también al benefactor orden cósmico, al universo creador, por todo lo que recibo.

Abundancia económica, entra en mi.

Celebración del ritual:

Para el elemento fuego puedes participar en una hoguera o preparar un fuego con mucho cuidado en una cacerola de cerámica grande. Si te apetece, ahí puedes quemar un escrito con todas aquellas cosas que quieras quemar y dejar atrás ya en tu vida. Pueden ser actitudes que obstaculizan tu riqueza material u otras muchas cosas. Puedes quemar la desconfianza en la provisión del universo, el miedo a no tener, a no tener bastante, la creencia en la escasez, o en las carencias. Tómate un tiempo, escribe y lo quemas recitando:

“Con este acto hoy decido purificar y limpiar mis miedos en relación al dinero, mi desconfianza en la abundancia, mi idea falsa de que no habrá bastante, y todas aquellas informaciones o patrones antiprosperidad que hay en mi consciente e inconsciente, míos o de mi línea familiar, que están impidiendo que la riqueza material se instale en mi vida.”

Para el elemento agua cojo un bol de vidrio o cerámica grande, lo pongo entre mis piernas, sentada, de manera que el bol que quede cerca de mi vientre. Y con el dedo índice mueve el agua hacia la derecha en forma de espiral y recita:

“Hoy me atrevo a reconectar mi intuición, a recordar mis capacidades, mis talentos y todo lo que yo soy, y me percibo como un ser consciente de toda la riqueza que poseo a todos los niveles, y me abro a ella para que fluya a través de mí. En mi está todo.”

Para el elemento aire presto unos minutos de atención consciente a mi respiración. Y me permito percibir el aire cargado de energía vital que entra por mis fosas nasales y que dejo marchar después con la espiración y recito:

“Hoy respiro con conciencia el aire que entra en mí, lleno de energía vital, esa energía que no veo pero sé que está, y de la misma manera hoy aprendo a respirar el aire que me envuelve, repleto de energía creativa positiva y de la intención de disfrutar, compartir, jugar. Cada vez que inspiro, la prosperidad entra en mi interior conectando con todo lo que ya he sembrado, presto a ser recogido.”

Ya hemos conectado con el elemento tierra al conectarnos con bosques y montañas, y también podemos tener cerca de nuestro cuerpo algunos cristales o piedras con los que sintonicemos especialmente.
Nos haremos con una vela roja, si puede ser natural, que simbolizará al primer chakra, que hunde sus raíces en la maravillosa abundancia de nuestro planeta y recitaremos:

“Soy la Madre Tierra y contengo en mí la frecuencia de la nutrición. Recibo el alimento físico, emocional, mental y espiritual que necesito para tener una experiencia económica feliz aquí y ahora.”


La vela ha de arder hasta que se apague.


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